Volviendo a la calma, tras una oleada de sentimientos encontrados, de pensamientos inmanejables por contradictorios, de risa y llanto compitiendo por poblar mi rostro.
Instinto… Miedo a tropezar con la misma piedra.
Razón… Dudo de ella.
Es una pena…
Una prueba a mi voluntad, a mi carácter, a mi capacidad de aceptación de las cosas que no puedo cambiar (serenidad). Es el momento de saber de qué material estoy hecha.
Acepto mi condición y voy a romper el círculo vicioso en el que me he encerrado consciente e inconscientemente (valor).
Serio conflicto interno por la fidelidad a mis principios, a mí misma.
Finalmente sé que hacer: No puedo , ni debo serme infiel.
¿Para qué jugar con fuego sabiendo que estoy empapada en gasolina? (sabiduría).
Y no es que no me provoque, pero la imprudencia me pasaría factura y ya he pagado muy caro mis errores al respecto.
No vivirán en mi mente sin pagar el alquiler…
Me encantaa tokayaa!!! como siempre te digoo... tienes el don de la palabra.
ResponderEliminarbesitos
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